Jesús Zelaya, el ingeniero peruano del aeropuerto LaGuardia (4 de septiembre de 2020)

Jesús Zelaya, el ingeniero peruano del aeropuerto LaGuardia

Por Eric Montoya (Publicado en AYLLU TIMES el 4 de septiembre de 2020)

La construcción del nuevo Aeropuerto LaGuardia ha sido reconocida como el Mejor Proyecto de Ingeniería del año 2020 por la revista especializada Engineering News-Record, considerada como una de las publicaciones más autorizadas de la industria de la construcción. 

En este proyecto participó un peruano, Jesús Domingo Zelaya, como ingeniero jefe del área electrónica de todo el programa. Todo un orgullo para nosotros.

Jesús Domingo es hijo de Julio Zelaya Simbrón y María Murichi. Tiene tres hermanos: Julio, Rosa y Giselle.

Historia familiar

“La primera que vino a este país fue mi mamá, ella llegó en 1984. Mi familia por parte materna tenía muchos años acá. En 1987 llegamos los cuatro hijos. Mi papá llegó en 1997”, cuenta Jesús Domingo, que está casado hace dieciseis años, tiene una hija de veinte años de un compromiso anterior y una niña de cuatro años.

Recuerda que llegó a vivir a Astoria cuando tenía diez años, estudió la primaria en el PS 111, en el Junior High School 141 y la secundaria en el Long Island City High School. 

Luego, llegaría su etapa de servicio militar a su patria adoptiva ingresando a la Marina.

“Entre la graduación del high school y el college, estuve seis años y medio en el Navy de los Estados Unidos, allí estudié y aprendí la electricidad, era electricista de barco, allí me empezó a gustar la electricidad. Me gustó la marina y decidí quedarme tres años más. Luego fue que me decidí a estudiar ingienería eléctrica”.

Experiencia laboral

Jesús Domingo Zelaya se graduó como ingeniero eléctrico en Politechnic University de Nueva York. Luego, comenzó a trabajar para una compañía que contrata para el Departamento de Defensa, en donde se hacen barcos y aviones. 

“Yo cogí una especialidad trabajando con los sistemas de fibra óptica y electricidad en un avión que estaban construyendo, trabajé cuatro años. Mientras trabajaba allí, hice mi máster de ingeniería eléctrica (sistemas eléctricos). Cuando me gradué del máster conseguí un trabajo en una constructora que estaba a cargo de los sistemas eléctricos en la reconstrucción de las Torres Gemelas, trabajé tres años en la reconstrucción del tren Path. Desde finales del 2006 hasta el 2009 trabajé en la reconstrucción de lo que vino a ser una entrada temporal de la estación Path. Luego que terminamos la estación del tren, la misma compañía constructora, me cambió al proyecto que estaba al lado que era el Museo del 9/11, yo fui el que corrí el proyecto eléctrico del museo y de las fuentes, trabajé allí casi dos años y medio más”.

Jesús Domingo siguió acumulando experiencia y preparándose para algo más grande que venía. “Luego con otra compañía estuve en un proyecto para renovar un hospital viejo y construir un nursing home al lado del hospital. Estuve a cargo de todos los sistemas, mecánicos, plomería, electricidad. Pero mi especialidad siempre ha sido los sistemas eléctricos”, explica Zelaya.

Todos los caminos conducen a LaGuardia

“En el 2016 me contactan y me dicen que están buscando una persona con especialidad en alta electricidad y sistemas eléctricos para trabajar en el proyecto del Aeropuerto LaGuardia, acepté y así fue como llegué a este proyecto”.

La compañía Skanska USA le dio a Jesús Domingo Zelaya la responsabilidad de manejar el proyecto de colocar el cableado eléctrico del nuevo aeropuerto, un proyecto billonario, en el que nuestro compatriota tuvo el cargo de Senior Project Manager Electrical.

Actualmente, Zelaya sigue trabajando en el Aeropuerto LaGuardia.

EL FÚTBOL Y EL PERÚ

“Soy hincha de la “U”, mi abuelo también era de la “U”, mi papá desde chiquito me llevaba al estadio. Mi papá me contó que mi abuelo llegó a jugar con Lolo Fernández. Soy muy fanático del fútbol. Cuando mi hija tenía 18 años la llevé al mundial de Rusia, para seguir a la selección junto a la barra peruana.

Cuando yo tenía quince años regresé al Perú y de alli volví en el 2008, cuando tenía 32 años. Me gustaría regresar ojalá se pueda pronto, por todo esto del COVID”.